Orientaciones Generales Para el Bebé Sordo

Orientación-01

Orientación-01En este apartado, se dan unas recomendaciones generales para poder participar en el tratamiento desde casa. No hay que olvidar, que cada caso en individual y deberán seguir las orientaciones de su logopeda.

Esta, será la que guiará el trabajo de casa. Lo que se da a continuación, no dejan de ser ORIENTACIONES GENERALES.

En este apartado, se dan algunas recomendaciones para poder participar en el proceso de rehabilitación desde casa. La logopeda orientará y guiará a la familia, atendiendo a las características individuales de cada caso.
A continuación ofrecemos unas ORIENTACIONES GENERALES.

Reforzar (premiar) el balbuceo espontáneo. Para mantener y favorecer las expresiones del bebé, conviene acercarnos y contestarle tratando de imitar los sonidos que él hace ; de esta forma se irá haciendo consciente de que con su voz llama la atención y será una motivación para utilizarla.

Favorecer la detección de sonidos y su identificación. Desde el inicio debemos fomentar la atención hacia los sonidos. Es importante informar de los sonidos y los ruidos que se producen a nuestro alrededor.
Orientación-02
Usar juguetes e instrumentos sonoros y también objetos que produzcan vibraciones

Anticipar situaciones: debemos acostumbrarnos a avisarle, siempre que sea posible, de las cosas que vamos a hacer; por ejemplo, si es la hora del baño, podemos enseñarle objetos que están relacionados con esa situación (esponja, toalla…). De igual forma, haremos en otro tipo de situaciones como a la hora de la comida, enseñarle el biberón…

Hablar cerca del bebé, de frente y procurando estar a su altura. Aprovechar el contacto corporal cuando lo tengamos en brazos y hacerle notar la vibraciones que se producen al hablar. También podemos cantarle para que vaya adquiriendo conciencia de ritmo.

Es muy importante que el niño fije la atención sobre la persona que le habla. No puede observar un objeto o cuento y mirar a la vez al adulto; debemos ser tolerantes y pacientes, dar al bebé más tiempo para que cambie el objeto de su atención y que aprenda a mirar alternadamente (objeto-rostro).